«No os ajustéis a este mundo, sino transformaos por la renovación de la mente, para que sepáis discernir lo que es la voluntad de Dios, lo bueno, lo que le agrada, lo perfecto.» (Rom 12, 2)
* - * - * - * - * - * - *
14 marzo 2016
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)